Dependencia emocional

Depender emocionalmente de otro es  anteponer nuestros sentimientos, emociones y deseos por los del otro, creyendo que así estamos bien y somos felices. Pensamos que lo que está mal se podrá cambiar y que el otro/a comenzará a actuar de la forma que nosotros deseamos. Justificamos sin darnos cuenta, una y otra vez. Pero no sólo existe una dependencia emocional en las relaciones de pareja, también se puede dar en amistades, familia y personas que están a nuestro alrededor. 

 

En las dependencias emocionales siempre estarán presentes los sentimientos de querer agradar al otro, el temor a equivocarte y provocar una reacción negativa en el otro, la culpa por no actuar mejor para mantener la atención del otro, el arrepentimiento.

 Esta vez, me referiré solo a la dependencia emocional de pareja, y te invito a que te hagas las siguientes preguntas para saber si realmente estás en el grupo de las personas que dependen emocionalmente de sus parejas:

-¿Cómo te trata tu pareja?,¿cómo se dirige a t?i, ¿te insulta?, ¿te humilla?, ¿te menosprecia?,¿te falta el respeto?¿su forma de dirigirse a ti es diferente estando solos a estar con otras personas?

- ¿Sientes que tu pareja te valora, te admira y ve en tí virtudes? ¿Te lo dice?

- ¿Sientes la sinceridad en tu pareja? ¿Te miente? ¿ te oculta cosas?

- ¿Pasas más días llorando o sintiendote mal, que días sintiéndote plena y feliz al lado de tu pareja?

-¿Sientes que a su lado dejas de ser tú para convertirte en lo que él necesita o espera que seas?

- ¿Te genera ansiedad su manera de ser o de comportarse con los demás?

- ¿Haces lo que realmente te gusta, lo que te hace feliz, lo que te realiza como mujer/hombre?

- ¿Tienen proyectos en común, deseados de corazón por los dos? ¿comparten aficiones, ilusiones?

-¿Sientes que sexualmente haces feliz a tu pareja? ¿tú te sientes satisfecha sexualmente?

- ¿Han dejado la relación reiteradas veces y piensas en lo feliz que te hacen las reconciliaciones?

 Si en alguna de estas preguntas te has sentido con muchas dudas o has respondido más pensando en el otro que en tí, creo que debes seguir leyendo...

 La receta de un amor sano es muy simple, pero si falta alguno de sus componentes, no funciona. Si una relación funciona bien, no hay duda de que los siguientes ingredientes deberán estar presentes en su día a día:

 

 

DESEO: ha de existir pasión, sexo y erotismo que generarán momentos de intimidad y máximo acercamiento.. Es importante que los dos sientan que tienen una vida sexual plena y satisfactoria con el otro.

 

 

AMISTAD: nuestra pareja deberá ser nuestro mejor amigo/a, con quien sintamos una confianza absoluta, alguien con quien compartir, a quien admirar y en quien apoyarse si es necesario.

 

 

PROPÓSITO COMÚN : debemos tener un propósito de vida en común, sentir que miramos hacia la misma dirección. Hacer planes, implicarnos. No debemos renunciar a nuestros propósitos individuales, debemos compartirlos con el otro.

 

 

VALORES: serán nuestros principios básicos, aquello con lo que nos identificamos en la vida, que nos da sentido y dirección .Serán nuestros sentimientos y convicciones más importantes y que debemos compartir con el otro.

 

 

COMPROMISO: Implica poner todo de nuestra parte para que la relación funciones, cerrarse mentalmente a otras personas o relaciones que puedan enturbiar nuestra relación de pareja. Será tener la seguridad de que el otro estará ahí y que no va buscando consciente o inconscientemente a otra persona que nos sustituya. Claramente cada pareja tiene sus compromisos y son esos compromisos con los que comenzamos nuestra relación los que deben mantenerse a lo largo del tiempo.

 

 

TRANSPARENCIA: Los secretos que afectan directamente a la relación de pareja, no deberían ser aceptados, saber que el otro siempre responderá con la verdad.

 Cuando estos componentes comienzan a no estar presentes y aún así, sigues pensando que la persona que está a tu lado es la misma persona maravillosa que te enamoró y que elegiste cuando la historia de amor comenzaba, quiere decir que ya no tienes la libertad de la elección, ahora tienes la dependencia, la comodidad, la rutina, el miedo, la falsa felicidad. Cuando en una pareja los dos son tan diferentes, solo hay una manera de seguir juntos: que uno de los dos deje de ser quien es y se amolde al otro....quiere decir que uno de los dos perderá su libertad, su identidad...pasará a depender emocionalmente del otro.

Si te sientes identificada con alguna de estas frases o párrafos, busca ayuda, asesórate, aclárate y vive.

Para terminar, los dejo con un pequeño texto extraído de la misma fuente en la que me he basado para este artículo, es de Virginia Satir y dice:

 "Quiero amarte sin asfixiarte, apreciarte sin juzgarte, unirme a ti sin esclavizarte, invitarte sin exigirte. Dejarte sin sentirme culpable, criticarte sin herirte y ayudarte sin menospreciarte. Si puedo obtener lo mismo de ti, entonces podremos realmente encontrarnos y enriquecernos mutuamente".

 

Fuente: "Cuando amar demasiado es depender". Autora: Silvia Congost.

 

Psicología y Apoyo
Enero 2016