No nos damos cuenta cómo las relaciones que vivimos se van gastando o apagando. He querido tomar esta frase para encender una luz roja y pensar cuándo es el momento de darnos cuenta que las relaciones y lazos que tenemos con nuestras parejas o amigos han comenzado a apagarse o extinguirse.
Que tu dolor ya no me duela es triste y que tu alegría no me alegre también lo es. Si crees que te encuentras en alguna de estas situaciones, tal vez es momento de generar algún cambio en tu vida. No te acostumbres a lo que no te hace sentir ni disfrutar, aprende a reconocer el momento de cambio.