Sin ser su objetivo principal, este confinamiento está ayudando a encontrarnos con nosotros mismos y con nuestros seres queridos (incluso con los que están más alejados físicamente). Estamos teniendo una gran oportunidad para trabajar en nuestro presente y darnos cuenta de lo que queremos y de lo que NO queremos en nuestra próxima cuasi vida cotidiana.
Fundamental será confiar en nuestro propio proceso y olvidarnos de las apariencias. Confiar en lo que nos dice nuestro interior es fundamental. Cada uno viene con una trayectoria personal, tiene un presente único y elabora unos objetivos determinados. También nuestras relaciones interpersonales serán fundamentales en nuestro trabajo personal.
De gran importancia será darnos cuenta que pese al dolor e incertidumbre que nos ha traído esta pandemia, estamos teniendo la oportunidad de contactar con nuestras emociones, haciendo un corte en nuestras vidas para reparar lo reparable y vivir y conectarnos con nuestro presente y futuro más próximo.
Dentro de muy poco terminará el tiempo de confinamiento y comenzará la activación de nuestra nueva vida enmendada. Se nos presentarán muchas dificultades y tendremos que enfrentarnos a nuevas situaciones. Sin embargo, ya habremos decidido nuestros nuevos objetivos y reforzado nuestros valores. Por muy complicado que se presente el futuro, seguro que podremos enfrentar cada situación de la mejor manera. Si éstas se presentan muy complicadas, recuerda que no podremos apreciar bien la luz sin antes haber conocido la oscuridad.
Carmen Paz Alza Millie
Psicóloga.