Si tienes síntomas del tipo:
- Dolor de estómago de forma frecuente y sobretodo después de comer
- Diarreas sin explicación
- Anemias recurrentes
- Dolores de cabeza que no responden a analgésicos
- Hinchazón abdominal
- Problemas de control de peso
- Dolores de articulaciones
- otros
No dudes en consultar a tu médico de cabecera quien te orientará o mandará las pruebas pertinentes.
Con el diagnóstico la vida da un giro de 360 grados porque te sientes limitada/o en la ingesta de alimentos y tus emociones juegan malas pasadas, pero creeme que vale la pena saberlo y hacer un giro en tu alimentación. Te acostumbras rápido a las diferencias de sabores, pero sobretodo, no estás consumiendo el veneno que tu cuerpo no sabe o no puede digerir. Si eres consciente de que la vida es un cambio continuo, aceptarás que te ha tocado cambiar de costumbres alimenticias y no es más que eso. Bueno, tu bolsillo también lo notará, pero tienes opciones de preparar en en casa muchas cosas, platos y panes alternativos que te ayudarán a equilibrar la cesta de la compra. Ahí también está uno de nuestros objetivos, crear o votar políticas que apoyen los cuadros/trastornos alimenticios y se traduzca en que el celiaco pueda vivir y alimentarse como cualquier ciudadano.
Cuida tu cuerpo y disfruta también sin gluten.
Carmen Paz Alza Millie
Psicóloga celiaca.
Mayo 2024